Cadenas de suministro resilientes y ágiles para afrontar el futuro
A lo largo de 2020, atestiguamos el gran estrés al que estuvieron sometidas las cadenas de suministro como resultado de las alteraciones provocadas por la pandemia y de un entorno económico volátil.
En medio de este complicado escenario, las organizaciones tuvieron que afrontar serios retos para continuar produciendo y satisfacer una demanda que cambiaba constantemente.
Las lecciones que las empresas han aprendido en el último año y medio las han llevado a ser más resilientes y evolucionar digitalmente a una mayor velocidad de la prevista.
La adopción de mejores prácticas e innovaciones como la analítica y el machine learning les ayudó a reforzar el desempeño de sus cadenas de suministro.
Hoy podemos observar que muchas empresas están monitoreando muy de cerca las tendencias históricas y la demanda, y analizando los datos de los consumidores con el objetivo de hacer mejores pronósticos de corto plazo.
Esa data puede compartirse y aprovecharse a lo largo de toda la cadena de suministro, y promover así la colaboración y alinear la capacidad con la demanda.
Rediseños en busca de cadenas de suministro resilientes
Es una buena oportunidad para que las empresas realicen una revisión minuciosa de sus cadenas de suministro y rediseñarlas para hacerlas más resistentes a los eventos adversos, al tiempo de mejorar su resiliencia y agilidad.
Sin duda, la resiliencia y la agilidad son fundamentales en un momento en que las variaciones en la demanda son complejas y tienen distintos niveles de riesgo en cada industria.
Las empresas de manufactura, por ejemplo, necesitan interpretar una serie de señales de la demanda de los fabricantes a los que atiende.
En sectores como el de la salud, se debe prestar atención a los lugares donde se elevan los contagios y es necesario tomar acciones preventivas.
En ambos casos, mejorar la capacidad de capturar, analizar y pronosticar la demanda de corto plazo (planeación) es esencial para optimizar el desempeño de las cadenas de suministro en medio de la volatilidad.
Esto, a su vez, permite manejar los cambios en la demanda de forma proactiva ya sea por región, por canal o por producto y, por tanto, coordinar los niveles de oferta y la logística para satisfacer la demanda.
Tecnología para tomar mejores decisiones
Con la analítica avanzada, la inteligencia artificial (IA), el internet de las cosas (IoT) y la nube, los pronósticos de la demanda se hacen con mucha mayor precisión, lo que ayuda a los líderes empresariales a tomar decisiones basadas en datos sobre cómo mejorar las operaciones de sus cadenas de suministro.
La experiencia ha demostrado que esto también se traduce en menores inventarios y costos, así como en mayores ingresos y ganancias.
En cuanto a los beneficios, estos comprenden mejores relaciones con clientes y proveedores, y nuevas oportunidades de hacer negocio con ellos, o incluso tener acceso al talento y la tecnología de los proveedores.
La resiliencia y la agilidad requieren un cambio organizacional, el cual puede partir de identificar dónde se concentra la mayoría del consumo de productos, así como de dónde las necesidades son más críticas.
De ahí, es posible establecer una estrategia para evaluar los datos actuales de la demanda y determinar la aplicación para su pronóstico.
También ayuda a invertir en nuevo talento, herramientas y tecnologías especializadas donde los métodos analíticos avanzados puedan mejorar los pronósticos, y compartirlos con los socios de la cadena de suministro.
Además, es una buena oportunidad de crear un programa de mejora continua de las operaciones de la cadena de suministro utilizando metodologías lean y reestructurarla para asegurar la resiliencia y la agilidad.
Cadenas de suministro seguirán bajo estrés
Mientras la pandemia no se mengüe, la economía sufra altibajos y la oferta y la demanda en los mercados globales sigan cambiando continuamente, la producción y las cadenas de suministro seguirán estando bajo estrés.
De ahí que necesiten ser ágiles y resilientes, y que las organizaciones apliquen las mejores prácticas, las lecciones aprendidas y tecnologías clave podrán hacer prosperar su negocio y satisfacer las necesidades de sus clientes tanto en tiempos de crisis y de bonanza.